Fue intendente de Rosario entre 2003 y 2011 y gobernador de la provincia de 2015 a 2019, y gran referente del Socialismo en el país. Estaba internado desde hacía casi 2 semanas por un cuadro grave de coronavirus. Profundo dolor y conmoción.

Murió Miguel Lifschitz. Tenía 65 años y estaba internado en un sanatorio de Rosario por un cuadro de coronavirus. Su salud fue desmejorando día a día y se encontraba en terapia intensiva. Fue intendente de la ciudad durante dos períodos, gobernador de la provincia, diputado y senador provincial.
Su muerte deja un profundo dolor en la política nacional, en sus compañeros y compañeras, familiares y amigos.
Miguel Lifschitz nació el 13 de septiembre de 1955. Cursó sus estudios secundarios en el Instituto Politécnico Superior de la Universidad Nacional de Rosario. Luego pasó por la Facultad de Ciencias Exactas, Ingeniería y Agrimensura de la Universidad Nacional de Rosario, donde se recibió como Ingeniero Civil.
A principios de la década del 70 comenzó a interesarse por la política y se sumó al Partido Socialista Popular. En 1989 se convirtió en Director General del Servicio Público de la Vivienda de Rosario, bajo la intendencia de Héctor Cavallero.
Luego, durante la gestión de Hermes Binner al frente de la ciudad, se desempeñó en distintas funciones dentro del gabinete: secretario General de la Municipalidad, secretario de Servicios Públicos y coordinador General de Gabinete.
En 2003 accedió a su primer gran cargo electivo y se convirtió en intendente de Rosario. Al frente de su querida ciudad estuvo durante 8 años, luego de ser reelegido en 2007. Tanto sus adversarios políticos como sus compañeros destacaban su enorme capacidad de trabajo y gestión.
En 2011, tras su doble mandato como intendente, fue elegido como senador provincial por el departamento Rosario.
En junio de 2015 ganó unas reñidas elecciones para convertirse en gobernador de Santa Fe, representando al socialismo y al Frente Progresista Cívico y Social.
En su gestión de cuatro años, reforzó la política de salud de la provincia, que había iniciado su antecesor Hermes Binner, con la terminación y construcción de hospitales modulares (el de Venado Tuerto, Ceres y el nuevo hospital Iturraspe). Además, firmó importantes convenios con municipios y comunas, llevó adelante la urbanización (Plan Abre) en barrios postergados de las grandes ciudades e impulsó programas de inclusión. Su cuenta pendiente, como él mismo lo reconoció, fue la seguridad.
En la actualidad, tras ser elegido en 2019 como diputado provincial, se desempeñaba como presidente de la Cámara de Diputados. Era la figura más fuerte e importante del socialismo.