El conductor del auto que produjo el impacto fatal en la zona sur de Rosario, en el que murieron un padre y su hijo de 8 años, fue imputado por homicidio simple. Por primera vez se vieron imágenes de las cámaras de seguridad de la zona.
Germán Schoeller fue imputado esta semana por homicidico simple con dolo eventual. Era el conductor del Renault Sandero que la noche del 20 de marzo pasado impactó contra un Citron C3 y le causó la muerte a David Pizorno y a su hijo Valentino, de 8 años. En el auto también estaba Cintia, esposa de David y mamá del niño, quien sobrevivió.
El mismo día de la imputación se conocieron imágenes del momento del choque. En la secuencia de las cámaras de seguridad, se observa que el vehículo de Pizorno avanza lentamente por calle Ayacucho y que al llegar al cruce con Avenida del Rosario, un Citroen C4 pasa a toda velocidad, evitando golpearlo por milímetros.
Luego, aparece en cámara el Sandero manejado por Schoeller, que a gran velocidad -según las pericias a unos 130 kilómetros por hora- impacta de lleno contra el costado del auto de la familia, provocando ambas muertes en el acto.
La declaración del imputado
Germán Scholler afirmó que no tomó «dimensión de la velocidad» a la que circulaba, en su declaración durante la audiencia imputativa.
«Esa noche nos juntamos a comer con amigos. Salimos de ahí alrededor de las 12 porque el dueño estaba cansado, y nos dirigimos rumbo a la casa de Pablo —el otro imputado—. Salimos por Castro Barros y yo lo sigo porque yo no conozco el barrio. Él empieza a acelerar y no tomo dimensión de la velocidad, pero sin ánimo de picar ni de correr carreras, ni mucho menos», argumentó el hombre de 36 años.
«Perdí noción de la velocidad. En el afán de seguirlo presté más atención a lo que él hacía —por el amigo— que al entorno. Fue por desconocer y no saber que hay una calle tan importante como Ayacucho. Y cuando me quiero acordar siento la colisión», amplió.
Quedó en prisión preventiva efectiva por plazo de ley y la fiscalía detalló que la carátula preve una pena que va de 8 a 25 años de prisión.